Juegos y actividades para niños y perros

Los juegos y actividades para niños y perros ayudan a reforzar el vínculo entre ambos, muy importante para fomentar una relación saludable y segura.

Es fundamental que perros y niños jueguen y realicen actividades rutinarias conjuntamente para ayudar a crear una relación de confianza y diversión entre ambos.

Me refiero a actividades como:

  1. Juego conjunto: fomenta el juego conjunto entre el perro y el niño. Puedes jugar juegos como buscar, lanzar la pelota o esconder objetos.
  2. Actividades conjuntas: sal a caminar o realiza actividades al aire libre con el perro y el niño.
  3. Refuerzo positivo: utiliza el refuerzo positivo para premiar al perro cuando se comporta bien con el niño. Esto puede incluir golosinas, elogios y caricias.
  4. Sesiones de entrenamiento: enseña al perro comandos básicos como sentarse, quedarse y acostarse. Esto ayuda a establecer la jerarquía en la relación entre el perro y el niño y promueve el respeto mutuo.
  5. Cuidado conjunto: enseña al niño cómo cuidar al perro, como cepillarlo o darle agua y comida. Esto puede fomentar el respeto y la responsabilidad en el niño.
  6. Rutinas conjuntas.

Si queremos que la relación entre nuestros niños y el perro sea equilibrada y segura, el juego y las actividades conjuntas no pueden faltar nunca en el día a día.

Cómo debe jugar un niño con un perro

Jugar con un perro puede ser una experiencia muy gratificante y beneficiosa para los niños.

Sin embargo, es importante que los niños entiendan cómo interactuar de manera segura y respetuosa con su perro.

juegos y actividades para niños y perros

Algunos consejos que puedes aplicar:

  1. Siempre supervisa: Un adulto debe estar presente para supervisar la interacción entre el niño y el perro. Esto es especialmente importante si el niño es muy joven o si el perro es grande y enérgico.
  2. Establecer límites claros: Enséñale a tu hijo cómo interactuar de manera segura con el perro. Explícale que el perro no debe ser agarrado o tocado de manera brusca, y que no se le debe molestar cuando está comiendo o durmiendo.
  3. Usar juguetes adecuados: Proporciona al niño juguetes seguros y apropiados para el perro. Los juguetes deben ser lo suficientemente fuertes para soportar la mordida de un perro y no deben ser tan pequeños que el perro pueda tragarlos accidentalmente.
  4. Evitar juegos bruscos: Los niños deben evitar juegos bruscos como empujar, golpear o saltar sobre el perro. Estos juegos pueden asustar al perro y llevar a una reacción agresiva.
  5. Enseñar comandos básicos: Enseña a tu hijo los comandos básicos como «siéntate» y «ven». Esto ayudará a que el niño controle al perro y evitará que el perro se emocione demasiado.
  6. Enfocarse en la diversión: La interacción entre un niño y un perro debe ser una experiencia divertida y positiva para ambos. Asegúrate de que el niño y el perro se diviertan juntos y que el perro no se sienta abrumado o estresado.

Recuerda, la seguridad es la prioridad número uno al interactuar con un perro.

Si tienes alguna preocupación acerca de la interacción entre tu hijo y tu perro, busca la ayuda de un entrenador profesional de perros o un veterinario.

Juegos y actividades para niños y perros

Algunas ideas de juegos y actividades que pueden disfrutar los perros y los niños juntos son:

  1. Juego de buscar: esconde un juguete o golosina para perros en un lugar visible y deja que el perro y el niño lo encuentren juntos.
  2. Juego de pelota: juega a lanzar y recuperar una pelota con el perro y el niño juntos. Asegúrate de que la pelota sea del tamaño adecuado para el perro.
  3. Paseos juntos: sal a caminar con el perro y el niño juntos. Deja que el niño lleve la correa bajo tu supervisión.
  4. Agility casero: crea un circuito de obstáculos casero usando cosas como conos, sillas, mantas, etc. y guía al perro y al niño a través del circuito juntos.
  5. Juego de arrastre: ata una cuerda o un juguete de arrastre a una vara y deja que el perro y el niño jueguen juntos a «tirar y soltar».
  6. Juego de escondite: esconde golosinas o juguetes por la casa o el jardín y deja que el perro y el niño los encuentren juntos.
  7. Juego de nombres: enséñale al niño los nombres de los juguetes y las golosinas del perro, y luego pídele que los nombre mientras el perro los recoge.
  8. Sesión de cariño: deja que el niño acaricie y cepille al perro bajo tu supervisión y guía.

No olvides supervisar las interacciones entre el perro y el niño y asegurarte de que tanto el perro como el niño estén cómodos y seguros en todo momento.

Algunos juegos a evitar entre niños y perros

Sobre todo en los juegos al aire libre, son muy comunes los juegos de lanzar piedras o palos.

En su lugar, es mejor llevarse un frisbee ya que los anteriores elementos pueden provocar lesiones en la boca y garganta del animal.

En aquellos casos donde haya un jardín con piscina por medio, no hay que quitar ojo de los juegos entre niños y perros.

Los casos de ahogamiento de perros o juegos bruscos de los niños pueden, sin querer, provocar el ahogamiento del animal.

Es muy fácil descansar en hamacas al tomar el sol y despistarse de lo que parecían juegos divertidos entre niños y perros.

Conclusión

Sin duda, jugar y realizar actividades conjuntas con un perro puede ser una experiencia muy beneficiosa para los niños.

Algunos de los muchos beneficios del juego conjunto entre niños y perros son:

  1. Fomenta la actividad física: Jugar con un perro puede ser una forma divertida y activa de hacer ejercicio. Los niños pueden correr, lanzar pelotas y jugar a perseguirse con el perro, lo que les ayuda a mantenerse activos y saludables.
  2. Promueve la socialización: Los niños que juegan con perros pueden aprender habilidades sociales importantes, como la empatía y la compasión. También pueden desarrollar habilidades de comunicación al interactuar con el perro y otros niños.
  3. Ayuda a reducir el estrés: Jugar con un perro puede ser una forma efectiva de reducir el estrés y la ansiedad en los niños. Los perros pueden proporcionar una sensación de calma y tranquilidad, lo que puede ser especialmente beneficioso para los niños que se sienten ansiosos o nerviosos.
  4. Aumenta la autoestima: Los niños que juegan con perros pueden sentir un sentido de logro y satisfacción cuando se divierten y se conectan con el perro. Esto puede ayudar a aumentar su autoestima y confianza.
  5. Enseña la responsabilidad: Jugar con un perro puede ayudar a los niños a aprender la responsabilidad al cuidar al perro, como alimentarlo, sacarlo a pasear y jugar con él de manera segura.
  6. Fomenta el aprendizaje: Jugar con un perro puede ser una forma divertida de aprender. Los niños pueden aprender sobre la ciencia detrás del comportamiento del perro, la biología del perro y la historia de los perros.

Nosotros no tenemos dudas: el mejor amigo que puede tener tu hijo es tu perro.

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