Adoptar a un perro puede llegar a ser abrumador porque se deben considerar múltiples aspectos frente a la adopción.
No obstante, no tiene que ser siempre abrumador, debido a que lo ideal sería que el nuevo integrante de la familia se encuentre rodeado de diversión, alegría, cuidados básicos y que pueda establecer lo más rápido posible una relación con su nueva familia.
Se trata de una experiencia muy satisfactoria, pero como todos sabemos, conlleva una gran responsabilidad y requiere de cuidados, cariños y atenciones constantes.
Pero, durante los primeros días puede ser un poco complejo lograrlo, sobre todo, si es la primera vez de la familia adoptando.
Toda relación de adopción tiene un proceso, un inicio, un desarrollo y un fin.
Pero, cuando adoptar a un perro es ya una realidad, se busca que éste se adapte lo más pronto posible a las costumbres del hogar.
En muchos casos, los cambios de escenarios pueden ser un golpe fuerte para la mascota, por lo que puede suponer la aparición de enfermedades, ansiedad, comportamiento agresivo, entre otros.
Pero esto se debe a la confusión que manifestaría al encontrarse en un ambiente desconocido para él.
Para poder ayudarte con todo esto, te contaremos todo lo necesario para que puedas adoptar a un perro de manera exitosa.
Aunque, vaya por delante, que no hay nada como integrar conocimientos sobre educación y cuidados antes de su llegada.
Esto, sin duda, te permitirá que su adaptación y educación se consiga de forma más rápida y eficaz.
¿Cómo prepararnos para la adopción del perro?
Tal y como sucede en los perros, los adoptantes también necesitan prepararse para la llegada de la mascota, por lo que tomar todas las previsiones necesarias puede hacer una gran diferencia.
Prepara todo lo que va a necesitar el perro
Comprar todo lo que puede necesitar el perro como la correa para salir de paseo, collar, cuencos para sus alimentos y agua, cama según sea su tamaño, juguetes, premios o snacks.
Todo esto ayudará que el perro pueda adaptarse mejor.
Aunque es posible que el perro no reconozca estos elementos si es un cachorro, le permitirán sentirse mucho más cómodo con su nueva familia.
Prepara la vivienda
La llegada de una mascota es similar a la de un bebé, lo mejor es que el espacio donde viva sea preparado previo a su llegada al hogar.
Debes revisar que todos los artículos peligrosos no estén al alcance del perro, debido a que es normal que sean muy curiosos y que quieran comenzar a observar, morder y lamer todo a su alrededor.
Nos referimos a cables, plantas, productos químicos, etc.
Adicionalmente, el resto de los integrantes de la familia también deben prepararse.
Deben discutir acerca de quiénes serán los encargados de la alimentación, los paseos, mantener las vacunas al día y la seguridad del perro.
Si en la convivencia ya existen otros animales, se debe cuidar de que el cachorro más pequeño siempre se mantenga a salvo y facilitarle el proceso de la transición poco a poco y de la mejor manera posible.
Asegúrate de asignar un espacio que sea seguro para el perro
Los perros son animales que disfrutan de tener un lugar especial para descansar.
Si quieres asegurarte de que la nueva mascota se mantiene cómoda y a salvo, proporciónale un lugar donde pueda descansar, dormir y jugar con sus juguetes con total libertad.
Algunos adoptantes optan por realizar este proceso a través de las jaulas transportadoras, pero si no te parece una buena opción, puedes utilizar una habitación que sea exclusiva para el perro.
Durante el proceso de integración se deben mantener los niños y otras mascotas fuera.
Haz un plan para elegir la fecha y traer al perro a casa
Lo ideal sería que te tomaras unos días libres para poder realizar todo el proceso con tranquilidad, así como la adptación del perro durante los primeros días.
Lo recomendable es no hacerlo durante el inicio de las vacaciones, debido a que el perro puede acostumbrarse a siempre verte en casa y, en el momento de la separación, cuando vuelvas a la rutina, el perro sentirá mucho tu ausencia.
Es importante que, cuando vayas a recoger al perro el trayecto se realice directo, es decir, sin ninguna parada de distracción en el camino.
Muéstrale la casa al llegar
Invita a que el perro olfatee y explore su nuevo hogar, dale todo el tiempo que necesite: los nuevos juguetes, su cama, los alrededores de la casa.
Es importante que se impongan límites, como decir un firme “NO” o “Déjalo”.
Además, también es importante que el perro olfatee el patio (en caso de tener), ya que le abre una nueva puerta hacia otro ambiente y le permite conocer el lugar donde realizará sus necesidades.
Si lo hace de manera exitosa se le puede proporcionar una golosina o juguete en forma de premio para que poco a poco vaya aprendiendo.
¡Importante! Si ya hubiera otro perro en caso es fundamental que la presentación de ambos se realice fuera de casa, en una zona neutral.
De esta manera no habrá problemas de invasión de territorio.
Convivencia con el niño
Debéis hacer un trabajo pedagógico importante con el pequeño de la casa.
Hay que explicarle que adoptar a un perro no es como comprar un juguete.
Es un ser que siente, que va a necesitar su espacio y hay que dejar claras también unas normas con la relación del niño con el perro.
Cuándo debe darle su espacio, qué puede pasar si se le molesta, enseñarle al cumplimiento de las normas del perro, etc.
Primeros días y la integración a la familia
Al adoptar a un perro, una de las primeras dudas de la familia es: ¿cuánto tiempo tardará en adaptarse?
Recordemos que los perros adoptados muchas veces son cachorros o provienen de un albergue de adopción, por lo que es posible que no reconozca ninguna de las comodidades que se le proporcionarán en su nuevo hogar.
Los humanos y los perros pueden adaptarse de manera similar, pero se tiene como referencia un periodo de dos meses para poder sentirse cómodo en su nuevo entorno.
Sin embargo, esto también puede depender de su historia vital, su pasado, si ha sido o no complicado.
Durante los primeros días podéis hacer frente a un perro miedoso, desconfiado e incluso agresivo, pero esto forma parte del proceso de adaptación.
Los problemas iniciales de conducta pueden ser bastante comunes y se manifiestan cuando el perro adoptado ha sufrido de estrés, pero es algo que con el tiempo desaparece.
Los cachorros tienen la capacidad de adaptarse con mayor rapidez al nuevo entorno, pero para los perros más grandes que poseen experiencias negativas puede ser más complejo.
La socialización incompleta, maltrato, abandono y una mala experiencia familiar pueden hacer que un perro se sienta emocionalmente desconfiado ante el nuevo entorno en donde vive.
Sería muy normal que manifestara intenciones de querer estar solo, tener comportamientos agresivos con otras personas y animales, etc.
Eso mismo ocurre con los perros que presentan enfermedades que puedan llegar a ocasionar molestias, dolor y debilidad, por lo que esto puede llegar a suponer una carga adicional para sus adoptantes.
Lo bueno es que el proceso de adaptación y estabilización puede ser mejorado en múltiples aspectos.
Por ejemplo, proporcionándole un ambiente tranquilo, dejando que el perro olfatee.
Esto es muy importante para ellos, dejarles que exploren el nuevo espacio, tengan sus propios utensilios como comedero, bebedero, juguetes y cama para dormir.
Importancia de los paseos
Antes de ingresar a la nueva casa se recomienda que se realice un paseo por la zona.
Esto puede ayudar a que el perro se relaje tras el viaje, además de que se le proporciona la opción de que pueda realizar sus necesidades fuera de casa.
Además, también se recomienda que se le proporcione paseos de al menos 20 minutos diarios unas tres veces al día, no importa que se trate de paseos cortos.
Lo importante es que se realice actividad física y que el perro pueda liberar estrés tras su llegada al nuevo hogar.
Enseñar las ordenes básicas de adiestramiento
Es imprescindible que tras adoptar a un perro y su adaptación, se le den órdenes básicas para su educación, como lo es, siéntate, quieto, túmbate, entre otras.
Es fundamental que el perro aprenda estas acciones, debido a que pueden ayudar a que en un futuro funcionen como mecanismo de precaución si se decide que el perro estará sin su correa.
Con tan solo unos minutos al día se puede mostrar al perro las normas perfectas para que pueda convivir con otras personas.
Pero, es importante que no se abuse de los comandos, recuerde que la idea de tener una mascota a casa es proporcionarle la mejor calidad de vida posible.
Por supuesto, no debes considerar que esto se refiere a dejar que tu mascota haga lo que quiera cuando quiera, es importante establecer límites para que no se sobrepase y que su aprendizaje sea exitoso.
Consejos que ayudarán a la adaptación del perro al hogar
Durante la etapa de adaptación al hogar el perro puede orinar de manera constante en diversas áreas del hogar.
Si es un cachorro es lo más normal hasta que aprendan a contener sus esfínteres.
En caso de adoptar a un perro adulto, esto funciona como una forma de marcar su territorio.
Si esto ocurre, debes evitar los gritos, órdenes saturadas y los castigos.
El afecto es una muestra de cariño que se le proporciona a los perros en grandes cantidades, sobre todo, cuando se trata de animales maltratados.
Aunque, los expertos aconsejan que lo mejor es evitar abrazar, besar y acariciar de manera constante al perro, lo mejor para demostrarle tu cariño es ofrecerle un lugar cómodo y seguro y alabanzas cuando hace las cosas bien.
La separación del perro con sus cuidadores anteriores u otros perros puede llegar a ocasionarle una gran ansiedad.
La tarea del adoptante es permitir que el perro tenga la mejor vida, por lo que tiene que proporcionarle comodidad, un lugar seguro, cómodo y que posea la atención adecuada para poder solucionar rápidamente el problema.
Debes mantenerte acompañando al perro por al menos 20 días, es importante que en este lapso de tiempo no lo dejes mucho tiempo solo.
De esta forma, el perro se sentirá mucho más a gusto.
Durante los paseos debes mantener al perro con una correa siempre.
Es importante que se le permita explorar la calle sin ningún problema.
Primero se debe iniciar con los paseos cortos, recorrer los alrededores de la casa y luego ampliar los horizontes.
Mejores razas de perros para adoptar en una familia con niños
Cuando adoptar a un perro ya es una realidad, la alegría es completamente innegable.
Se tiene un nuevo integrante en la familia, los niños disfrutarán compartiendo con él y le enseñarán nuevas cosas, lo cuidarán y protegerán.
Los perros son mascotas ideales para la vigilancia, pero también proporcionan buenas dosis de entretenimiento.
No obstante, existen razas que no siempre son adecuadas para convivir en familiar con niños, ya que pueden ser perros mordedores, con temperamento fuerte o que necesitan de un tipo de entrenamiento especial.
De acuerdo con expertos, los perros perfectos para integrarse a familiar son aquellos que poseen una personalidad dócil, son fáciles de adiestrar, son juguetones y mucho más.
Pero, dentro de las más de 700 razas de perros que existen, las que mejor conviven con niños son:
Beagle
Los perros de esta raza tienen orejas bastantes grandes, suelen ser poco peleadores, tienen un olfato bastante destacable y les encanta jugar.
Bulldog
Aunque tiene un gran tamaño no es un perro intimidante, lo cierto es que se trata de perros que son seleccionados como mejores mascotas para convivir con familiar que tienen niños.
Son perros mansos y más cuando se crían desde que son cachorros.
Son guardianes de la casa y bastantes cariñosos con toda su familia.
Terranova
Que su gran tamaño no te intimide, los perros de esta raza son muy amables, dóciles y tranquilos, además de bastante inteligentes.
Por ello, se considera que se trata de una de las razas con mayor facilidad de adiestramiento.
Golden Retriever
Este hermoso perro es perfecto para la familia con niños.
Cuenta con una fisonomía similar al labrador retriever y son ideales para cuidar de la familia y el hogar.
Son bastante fieles y dóciles.
Es un perro muy complaciente, por lo tanto, es muy extraño que tenga enfrentamiento con otras razas.
Pug
Los pug son perros increíbles, pero su aspecto muchas veces no es el más encantador.
No obstante, son los compañeros más fieles para compartir con la familia.
Son cariñosos, pero es recomendable que no se dejen por mucho tiempo solos, ya que pueden desarrollar ansiedad o tristeza.
Cocker Spaniel
Es una de las razas más inquietas que puede existir.
Disfrutan de querer jugar, corren y viven la vida al máximo durante sus salidas al aire libre.
Es importante que se les deje salir varias veces al día, debido a que drenan la energía de esta forma, porque de no hacerlo pueden generar mal genio.
Adoptar a un perro, una experiencia inolvidable
Desde nuestra experiencia, adoptar a un perro siempre nos ha enriquecido como personas y como familia.
La clave es tener las cosas muy claras, tener un plan y tener conocimientos para su adaptación, educación y cuidados.
Nosotros ya no podemos vivir sin perro y absolutamente todos los que hemos tenido han sido adoptados (y sí, todos han sido razas mestizas).
Los niños que crecen con perros no pueden tener mejores compañeros de vida, de juegos y de aventuras.
